Varias personas, incluidos 17 niños, reciben tratamiento después de que un avión arrojó combustible en su aproximación final al aeropuerto LAX. Esta tarde, el Departamento de Bomberos del condado de Los Ángeles dijo que fueron llamados a una escuela primaria para evaluar a varios pacientes después de un aparente depósito de combustible de un avión.
Un total de 70 bomberos y paramédicos respondieron a la escena para ayudar a 26 pacientes, 17 de los cuales eran niños. Todas las víctimas se quejaron de heridas leves.
Se confirmó que la sustancia era combustible para aviones.
El aeropuerto de LAX emitió una declaración sobre el incidente, diciendo que esta mañana el vuelo Delta 89 de LAX a Shanghai informó un problema mecánico y regresó al aeropuerto. Confirmaron que el avión realizó un volcado de combustible de emergencia antes de aterrizar. "Estamos preocupados por los informes de impactos en el suelo por la liberación de combustible, y estamos en directa comunicación con Delta mientras continúa su investigación", dijeron funcionarios del aeropuerto. La Administración Federal de Aviación (FAA) también emitió una declaración confirmando que están investigando el incidente.
"Existen procedimientos de descarga de combustible para las aeronaves que operan dentro y fuera de cualquier aeropuerto importante de los Estados Unidos", dijo la FAA.
"Estos procedimientos requieren que el combustible sea vertido sobre áreas despobladas designadas, típicamente a altitudes más altas para que el combustible se atomice y se disperse antes de llegar al suelo".
El departamento de bomberos señaló que las personas afectadas no tenían que ser transportadas al hospital y que las lesiones eran leves.
Los padres fueron dirigidos a los funcionarios de la escuela para organizar la recogida de sus hijos.
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